Desde que la sonda espacial Rosetta entregó el módulo de aterrizaje Philae sobre la superficie del cometa 67P no ha cesado su labor y ha continuado realizando sus exploraciones mientras orbita el cometa, según la ESA las misiones programadas para Rosetta están lejos de terminar y sus condiciones son óptimas con todos sus sistemas funcionando a la perfección.
La misión del módulo de aterrizaje Philae, terminó 64 horas después de su aterrizaje en la superficie del cometa, esto debido a que su batería se agotó y entró en estado de hibernación, no sin antes enviar los resultados de muchas mediciones las cuales están siendo analizadas por la ESA.
Rosetta seguirá haciendo historia, debido a que se convertirá en la primera aeronave en presenciar el desarrollo de la "coma" de un cometa, la cuál no es nada menos que una nube de gas que se forma alrededor del cometa cuando se acerca al sol, por lo que Rosetta tendrá que permanecer en una orbita alejada, para que la coma del cometa no afecte sus instrumentos. El punto más cercano al Sol en la trayectoria del cometa es a 186 millones de kilómetros, para realizarlo Rosetta tendrá que maniobrar para cambiar la distancia de su órbita en varias ocasiones a lo largo del año. Adicionalmente mientras la trayectoria del cometa se acerque al Sol, generará una mejor iluminación de la superficie del cometa lo cuál puede generar que las baterías de Philae se recarguen y se reactive...
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